Continua crisis migratoria en Acuña, Coahuila

Gobierno federal deja a su suerte al estado y municipios frente a la problemática de campamentos de cientos de migrantes.

Acuña, Coah.- La crisis migratoria en las fronteras de Coahuila no ha terminado y se ha extendido a municipios de otras regiones, donde ciudadanos y organizaciones apoyan con alimentos y otros enseres a los campamentos de Acuña y Piedras Negras como en el resto del estado, ofreciendo espacios y hasta empleos que les permitan mantenerse, mientras el Gobierno Federal se ha mantenido al margen y sin atender aspectos básicos como sanidad y sus consecuencias en salud.

Cada día  siguen llegando migrantes al Estado, algunos de ellos con una mira fija en la Frontera de Acuña o Piedras Negras mientras que otros han decidido quedarse en municipios de las regiones centro o carbonífera donde han sido acogidos por personas que les ayudan y hasta los emplean para ayudarlos.

Grupos ciudadanos se organizan para llevarles y prepararles alimentos, básicamente arroz, frijoles y guisados, pero también hay inconformidad en algunas familias que aportan porque les llevan sándwich y no los consumen.

Muchas familias migrantes en su mayoría haitianas están en lista de espera para acceder a una casa de campaña en Acuña, donde superan las 600 personas, entre diversas familias, estos migrantes esperan respuesta del Instituto de Migración en sus trámites para permanecer temporalmente y poder trabajar y sostenerse, muchas de estas esperan también la solución definitiva  a su situación migratoria para asentarse en México, otras solo esperan la oportunidad de nuevos intentos de cruzar hacia Estados Unidos, donde sigue una fuerte vigilancia.

Los servicios elementales como sanitarios portátiles son proporcionados por organizaciones religiosas de latinos radicados y regularizados en Estados Unidos, algunos casos de emergencias medicas son atendidas por los hospitales del Estado de Coahuila, mientras el municipio de Acuña, se mantiene al margen igual que el gobierno federal quien debería atender esta problemática social.

Organizaciones humanitarias estadounidenses o internacionales han donado más de 200 casas de campaña y solicitan el apoyo de ciudadanos y organizaciones para 200 unidades más para que las familias de haitianos no estén a la intemperie.

familias de Acuña que con frecuencia aportan apoyos para los migrantes, que son apoyados por grupos religiosos locales e internacionales, reconocen que no podran sostener por muchos dias mas la alimentacion de los campamentos migrantes y esperan que el gobierno federal enfrente este problema social y legal.